¿Recibiste una carta inductiva o esquela de SUNAT y no sabes cómo responder?
La reacción más común ante este tipo de comunicaciones es el miedo, la prisa… y, lamentablemente, los errores. Una mala respuesta puede abrir la puerta a multas, reparos tributarios o una fiscalización formal.
En este artículo te explicamos cómo preparar una respuesta sólida, técnica y estratégica, evitando los errores más frecuentes que cometen los contribuyentes.
¿Qué es una carta inductiva y por qué debes tomarla en serio?
Aunque no es una fiscalización formal, la carta inductiva sí es una advertencia importante. SUNAT te está dando la oportunidad de corregir de forma voluntaria posibles inconsistencias detectadas en tus declaraciones, libros contables o comprobantes.
Ignorarla o responder mal puede ser interpretado como un acto de incumplimiento.
¿Qué busca SUNAT con una carta inductiva?
- Detectar omisiones o inconsistencias mediante cruces de información con terceros.
- Inducir al cumplimiento tributario voluntario.
- Identificar ingresos no declarados, compras no fehacientes o gastos mal sustentados.
Errores comunes al responder una carta inductiva
❌ Responder sin análisis previo
Evita frases genéricas como “todo fue declarado correctamente” sin sustento técnico.
❌ Enviar documentación irrelevante
Adjuntar archivos sin orden ni relación directa solo complica el caso.
❌ Ignorar los plazos de respuesta
No responder a tiempo puede derivar en acciones más severas.
❌ Falta de trazabilidad documental
No basta con tener la factura; necesitas demostrar toda la cadena: contrato, ejecución, pago.
¿Cómo preparar una respuesta técnica y efectiva?
- Analiza el requerimiento con detalle
Identifica qué periodos y tributos están siendo observados.
- Cruza tu información contable
Valida que lo declarado coincida con tus sustentos.
- Organiza pruebas claras y pertinentes
Incluye comprobantes, medios de pago, contratos, guías y más, de forma estructurada.
- Redacta una respuesta argumentada y técnica
Expón tu razonamiento con base legal si es necesario, y concluye con claridad.
- Busca asesoría especializada
Una respuesta improvisada puede salir más cara que una consultoría experta.
¿Y si SUNAT no queda conforme?
Existen dos posibles escenarios:
- SUNAT cierra el caso sin mayores consecuencias.
- Se inicia una fiscalización formal, con todo lo que ello implica.
Por eso, tu respuesta debe ser preventiva, persuasiva y técnicamente impecable.
¿Quieres aprender a responder correctamente y proteger tu empresa?
En Quantum Escuela de Negocios hemos desarrollado un taller 100% práctico para ayudarte a dominar este proceso:
Taller práctico de fiscalización tributaria
Aprende a analizar requerimientos, preparar respuestas técnicas y reducir riesgos fiscales.
Conoce más sobre el taller aquí
Y si buscas acompañamiento constante en temas como este, accede a Quantum Soluciones, nuestra plataforma que te brinda asesoría especializada y capacitación continua para prevenir errores contables y tributarios en tu empresa.